¿Qué cuidados faciales necesito según mi edad y mi tipo de piel? En esta nota te explicamos todo lo que debes saber acerca del cuidado de tu piel
La piel es la capa más externa de nuestro cuerpo y es responsable de protegernos de la exposición a los elementos externos. Por lo tanto, es importante mantenerla saludable y bien cuidada a fin de prevenir problemas de salud o estéticos.
Comienza a los 25 años
A partir de los 25 años, la piel empieza a perder tersura y se inicia el envejecimiento celular, aunque sólo se aprecia microscópicamente. Durante esta etapa, el cuidado de la piel debe centrarse principalmente en mantenerla limpia e hidratada, a menos que se tenga un problema específico. Es importante escoger productos que estén científicamente probados y testados de manera independiente. De este modo, para que un producto tenga garantías, hace falta años de estudio, con ensayos clínicos y pruebas en personas.
A partir de los 30s se hace notable
Aunque los signos del envejecimiento empiezan a aparecer de manera más notoria a los 30-35 años, en forma de leves líneas de expresión (sobre todo alrededor de los ojos), no es hasta los 40 cuando las arrugas ya empiezan a ser profundas y la pérdida de firmeza se hace más notable. Es, para muchos especialistas, el momento clave para actuar.
A los 40s el envejecimiento celular se acelera
El proceso de envejecimiento empieza a evidenciarse a partir de los 40 años de edad, pero se acelera de forma considerable a partir de los 50, con la aparición de la menopausia. Está demostrado que con la disminución de los estrógenos se produce una pérdida de espesor cutáneo del 1% y de colágeno del 2% cada año, lo que se traduce en una piel menos resistente, menos firme y más flácida. Asimismo, la producción de sebo y la capacidad de retención de agua de la epidermis también disminuyen, por lo que la piel adquiere mayor sequedad y, por tanto, menor luminosidad.
Contra-resta el envejecimiento celular
Para tratar la piel dañada por el paso del tiempo, existe actualmente un gran abanico de posibilidades. Además de técnicas más invasivas como puede ser el láser o intervenciones quirúrgicas, la aplicación de sérums concentrados y cremas faciales son una opción menos invasiva y efectiva para mantener tu piel saludable a largo plazo.
Ingredientes como los extractos naturales (bluberry, gingseng, entre otros) y la vitamina C han demostrado científicamente que son efectivos a la hora de neutralizar los radicales libres que son los principales culpables del envejecimiento celular y reducir el estrés celular.
Por otro lado, el ácido hialurónico, el colágeno hidrolizado, las proteínas vegetales y la elastina resultan muy aconsejables para ayudar a regenerar las células dañadas y recuperar la firmeza de la piel, pues son agentes super hidratantes y nutritivos que ayuda a rellenar las arrugas.
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